TAPACHULA, Chis.,5 de octubre de 2021.- Los migrantes haitianos que mantenían vendiendo sobre la décima norte fueron desalojados en las últimas horas por personal de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal y Protección Ciudadana, esto tras permanecer varios meses vendiendo mercancía sobre las banquetas y calles.
Este mercado haitiano, que tenía como sucursal las principales calles de la ciudad, ya había causado el malestar de los comerciantes mexicanos, los vecinos y choferes de las diversas rutas del transporte público.
Sin embargo, las autoridades municipales en una tarea entre las secretarias de servicios públicos, seguridad pública y el gobierno de esta ciudad, lograron realizar un operativo por la madrugada para evitar que los antillanos permanecieran en el centro de la ciudad.
Ahora los caribeños, tendrán que vender su mercancía en el mercado de los laureles, donde ya les han habilitado en la parte trasera de ese central de abasto que nadie visita lugares para que puedan comercializar sus productos.
Francisco Tanchez, quien tiene un consultorio dental sobre la décima norte, dio a conocer que las autoridades realizaron estas actividades que demuestran un cambio sobre esta zona del centro, ya que este lugar amaneció limpio, transitable, la calle liberada y con un mejor aspecto para que las personas puedan acudir a realizar sus compras.
“Esperamos que siga limpio y sin presencia de migrantes haitianos, porque ya no hay suciedad, se ve super mejor, ahora las autoridades de la policía municipal están resguardando y se puede caminar mejor”.
La instalación del mercado de la sucursal de Haití en Tapachula, dejo pérdidas de hasta un 70 % a los comerciantes donde muchos se fueron de esta calle quedando pocos y ahora esperan poder retomar sus ventas.
Sin embargo, en toda esta cuadra se puede observar a elementos de la secretaría de seguridad pública y de servicios públicos que se mantienen en los lugares donde estaban los haitianos para evitar que se apropien de las banquetas, de la calle y los lugares de los comerciantes mexicanos.
Y es que algunos, haitianos que no han querido trasladarse a los lugares, han optado por vender de forma ambulante sus productos para no quedarse sin el sustento económico en lo que esperan sus documentos migratorios que los puede llevar desde los seis meses a un año.